martes, 10 de junio de 2025

Las fechas del Juzgado Militar de Prensa





Fachada del Ministerio del Interior, sobre proyecto de los arquitectos Manuel Ruiz de la Prada y José García Mesa, 1927 (AGMIR). Fuente: interior.gob.es
 

La historia es una tarea en permanente construcción y de autoría colectiva. La colaboración con los colegas supone un requisito asumido por quienes, a diferencia de los aficionados, nos dedicamos a la investigación en el ámbito universitario.

Hace unos días hablé con el periodista e historiador Víctor Úcar, que realiza su tesis doctoral bajo la dirección del catedrático Gutmaro Gómez Bravo (UCM). La misma guarda relación con los consejos de guerra de periodistas y escritores durante el período 1939-1945. Concretamente, se centra en la represión de quienes trabajaron en Unión Radio a lo largo de la guerra y, por su fidelidad a la II República, afrontaron problemas similares a los analizados en mis libros.

El intercambio de información se concretó en un dato que desconocía documentalmente: la fecha de la disolución del Juzgado Militar de Prensa. Hasta ahora había establecido un funcionamiento del mismo entre abril de 1939 y el verano de 1940. Me basaba en las hojas de servicios como oficiales del ejército del titular del juzgado, el capitán Manuel Martínez Gargallo, y de uno de los secretarios que actuaron en las dependencias de la plaza del Callao, 4.

La fecha del cierre no era errónea, pero ahora la podemos concretar gracias al trabajo de Víctor Úcar en el Archivo General del Ministerio del Interior (AGMI). El investigador ha localizado allí una copia de un documento cuya transcripción es la siguiente:

 

AUDITORIA DE GUERRA DEL EJÉRCITO DE OCUPACIÓN. JUZGADO MILITAR PERMANENTE N.º 18, PIAMONTE. N.º 28, segundo (Texto).

Por disposición del Excmo. Sr. Capitán General de la 1.ª Región Militar, en la orden correspondiente al 26 de julio ppd, el Juzgado Militar Permanente n.º 18 de mi cargo ha quedado constituido por el antiguo Especial de Prensa y el Permanente n.º 24, que tenía su domicilio en la Plaza del Callao, n.º 4. Lo que pongo en conocimiento a los efectos oportunos y la debida constancia en el expediente procesal de cuantos reclusos de esa prisión estuviesen a disposición de los desaparecidos Juzgados de Prensa y Permanente n.º 24, los que automáticamente pasan a mi disposición. Acúseme recibo. D.G. guarde a V. muchos años. Madrid 6 de agosto de 1940. El Juez Militar sin firma y sellado (Sr. Director de la Prisión de Conde de Toreno).

 

La transcripción de la comunicación del titular del Juzgado Permanente n.º 18 al director de la prisión de Conde de Toreno se enmarca en el intercambio de documentos sumariales entre los jueces y los responsables de los centros donde estaban recluidos quienes eran procesados y, posteriormente, permanecían en los mismos como condenados.

Lo significativo es la fecha: el Juzgado Militar de Prensa había dejado de estar operativo el 6 de agosto de 1940, al igual que el Permanente n.º 18, ambos localizados en la Plaza de Callao, n.º 4. Por lo tanto, la investigación sobre las actividades del capitán Manuel Martínez Gargallo y sus colaboradores debe circunscribirse al período comprendido entre la segunda quincena de abril de 1939 y finales de julio de 1940. Antes lo deduje por otra vía y ahora lo afirmo gracias a un documento del AGMI que prueba esta circunstancia.

La investigación de Víctor Úcar abre una nueva línea de trabajo. Dado el número de casos instruidos en el Juzgado Militar de Prensa, pocos en comparación con otros coetáneos de Madrid, cabe pensar que sus competencias fueran más allá de la instrucción de los sumarios protagonizados por escritores y periodistas.

Así lo hemos comprobado en la depuración de los miembros de la SGAE, donde el juez Manuel Martínez Gargallo estuvo presente, al igual que probablemente en las tareas relacionadas con la depuración de la APM y el Registro Oficial de Periodistas (ROP). Esta diversidad de destinos dentro del sistema represivo le obligaría a permanecer al margen de algunas tareas relacionadas con la instrucción sumarial. Lo hemos verificado gracias al análisis de más de veinte sumarios del Juzgado Militar de Prensa.

Víctor Olmos en su documentada historia de la APM publicada en 2006 indica que no hay pruebas de que la misma colaborara con el Juzgado Militar de Prensa en la instrucción de los sumarios. La prueba es que la asociación y el juzgado compartían las dependencias de Plaza de Callao y, como es lógico, no era preciso dictar una diligencia o providencia para que los archivos de la APM estuvieran al servicio de las citadas instrucciones.

Baste recordar que los secretarios del juzgado, en su informe inicial cuyo origen es un misterio, pudieron utilizar la documentación recopilada por la asociación para la depuración del colectivo periodístico. Esta documentación, supongo, desaparecería porque hubo décadas para que una entidad privada borrara las huellas de su colaboración en las tareas relacionadas con la represión del colectivo al que representa. La hipótesis, a falta de pruebas definitivas, parece plausible como punto de partida para la investigación.

Ahora, a la luz de la tesis doctoral de Víctor Úcar, cabe comprobar si el juez Manuel Martínez Gargallo y sus colaboradores estuvieron presentes en los sumarios instruidos contra quienes trabajaron en Unión Radio. Todavía es pronto para sacar conclusiones al respecto, pero esta línea de trabajo se enmarca en las previstas para la segunda fase del proyecto de investigación, que comenzará con el curso 25-26 tras la publicación de la trilogía dedicada a los consejos de guerra de periodistas y escritores. En fechas próximas, explicaré los objetivos de esa fase, cuya autoría será colectiva para procurar su continuidad tras mi jubilación en junio de 2028.


Pd.: Pido disculpas a mis lectores por haberme equivocado en la elección, precipitada, de la foto que inicialmente ilustraba esta entrada. Ya ha sido reemplazada por otra cuya fuente es la web del propio Ministerio. Agradezco que los lectores me hagan saber cualquier error que cometa para su corrección, pero lamento que se haga desde el anonimato y la falta de respeto. Yo nunca contestaré en estos términos. Y todavía me parece más absurdo que alguien abra una cuenta en Blogger exclusivamente para estos menesteres amparándose en un anonimato que, me temo, no es tal.







4 comentarios:

  1. Vd. se las da de historiador y publica un pie de foto falso. La foto reproduce la fachada del Palacio de Oriente y no el Ministerio del Interior.

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  2. https://www.interior.gob.es/opencms/ca/detalle/articulo/La-Policia-Nacional-y-Patrimonio-Nacional-recuperan-ocho-documentos-historicos-del-Archivo-General-del-Palacio/
    Aquí está el origen de mi lamentable error. No obstante, yo cuando me equivoco lo reconozco y, desde luego, no falto al respeto de nadie amparándome en el anonimato. Saludos.

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  3. Disculpe falta de respeto la suya hacia la opinión pública que con absoluta falta de rigor y diligencia intenta engañarla, lo que resulta más propio de "aficionados"

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